Image default
Pareja

En que mano se pone el anillo de compromiso

La tradición de entregar un anillo de compromiso es una de las más extendidas en el mundo, pero no todos saben con certeza en qué mano debe colocarse. Aunque pueda parecer una cuestión menor, el gesto tiene una carga simbólica importante y varía según el país, la cultura y las creencias personales. A lo largo de la historia, el anillo ha representado la promesa de unión, el inicio de una nueva etapa y el compromiso formal entre dos personas que planean casarse.

En muchos países occidentales, el anillo de compromiso se coloca en el dedo anular de la mano izquierda. Esta costumbre proviene de una creencia de la Antigua Roma, donde se pensaba que una vena conectaba directamente ese dedo con el corazón, conocida como la “vena amoris”. Aunque hoy sabemos que esa conexión anatómica no existe, la idea romántica ha perdurado y se ha convertido en norma en lugares como España, Francia, Italia, Estados Unidos y Reino Unido.

Sin embargo, no en todos los países se sigue esta práctica. En Alemania, Rusia, Polonia, Noruega y algunos países del este de Europa, el anillo de compromiso se coloca en la mano derecha. En estos casos, la elección está influida por tradiciones religiosas, costumbres locales o incluso por la forma en que se lleva posteriormente el anillo de matrimonio.

En España, la tradición varía según la región. En comunidades como Cataluña o Valencia, es común llevar el anillo de compromiso en la mano izquierda, mientras que en otras zonas como Madrid o Andalucía, muchas personas optan por la mano derecha. No existe una norma oficial, y la decisión suele depender de la familia, la pareja o incluso del joyero que asesora en el momento de la compra.

Más allá de la mano elegida, lo importante es el dedo: el anular. Este dedo ha sido históricamente asociado con el compromiso y el matrimonio. Su posición en la mano, junto a los demás dedos, simboliza estabilidad, unión y permanencia. Además, al ser uno de los dedos menos utilizados en tareas cotidianas, permite que el anillo se conserve mejor y se luzca con elegancia.

En algunos países latinoamericanos, como México, Argentina o Chile, también se sigue la tradición de colocarlo en la mano izquierda. Sin embargo, hay quienes prefieren la derecha por motivos religiosos o personales. En Brasil, por ejemplo, el anillo de compromiso se lleva en la mano derecha y se cambia a la izquierda tras la boda.

En culturas orientales, como la india o la china, el uso del anillo de compromiso no siempre forma parte de las tradiciones matrimoniales. En India, por ejemplo, es más común el uso de collares, pulseras o anillos en otros dedos como símbolo de compromiso. En China, el anillo de compromiso se ha popularizado en las últimas décadas, y suele colocarse en la mano izquierda siguiendo la influencia occidental.

La religión también puede influir en esta decisión. En el cristianismo ortodoxo, por ejemplo, se prefiere la mano derecha por considerarla más “correcta” o “honorable”. En el judaísmo, el anillo de boda se coloca tradicionalmente en el dedo índice durante la ceremonia, aunque luego se traslada al anular.

En cuanto a la evolución moderna, muchas parejas optan por romper con las tradiciones y elegir la mano que les resulte más cómoda o significativa. Algunas personas zurdas prefieren llevar el anillo en la mano derecha para evitar molestias. Otras deciden usarlo en un collar, como colgante, o incluso en una cadena en la muñeca. El simbolismo sigue presente, pero se adapta a los gustos y estilos de vida actuales.

También hay quienes eligen llevar el anillo de compromiso y el de matrimonio en la misma mano, uno encima del otro, mientras que otros los reparten entre ambas manos. En algunos casos, el anillo de compromiso se guarda tras la boda y se sustituye por el de matrimonio, aunque cada vez es más común llevar ambos.

En el mundo de la moda y la joyería, los diseñadores han comenzado a crear anillos que se complementan entre sí, pensados para ser usados juntos. Esto ha influido en la forma en que se colocan, ya que muchas veces el diseño dicta la posición más estética o cómoda.

La elección del material también puede influir. Los anillos de oro blanco, platino o titanio suelen ser más resistentes y cómodos para el uso diario, mientras que los de oro amarillo o con piedras preciosas requieren más cuidado. Esto puede hacer que algunas personas prefieran llevarlos en la mano menos dominante.

En definitiva, no existe una única respuesta a la pregunta “¿en qué mano se pone el anillo de compromiso?”. La tradición más extendida es el dedo anular de la mano izquierda, pero hay múltiples variantes según el país, la religión, la cultura y las preferencias personales. Lo importante es que el gesto tenga significado para la pareja y que el anillo represente realmente el compromiso que se desea compartir.

Para quienes están a punto de comprometerse, lo mejor es hablarlo abiertamente con la pareja, consultar las costumbres locales y decidir juntos qué opción les representa mejor. El anillo es solo el símbolo; el verdadero compromiso está en la intención, el respeto y el amor que se construye día a día.

Related posts

Experiencias para Regalar en Pareja: El Valor de los Recuerdos Compartidos

principal

100 métodos anticonceptivos

principal

7 hábitos diarios que fortalecen tu relación

principal